Una niña encerrada criada por perros y gatos.




En 2009 se descubrió a Natasha, una niña de cinco años de edad, en la ciudad de Chita, Siberia, que caminaba a cuatro patas, bebía el agua con la lengua y se comunicaba mediante ladridos tras haber sido criada por unos perros. 


La policía descubrió que había pasado toda su vida encerrado en una habitación con perros y gatos. La habitación no tenía calefacción, agua corriente ni un cuarto de baño. Cuando la encontraron no sabía hablar en su lengua nativa, el ruso. Según dijeron los que la encontraron tenía los "atributos de un animal." Su padre, Víctor Lozhkin de 27 años, y su madre, Yana Mikhailova, de 25, no tuvieron contacto con Natasha durante dos años. Fueron detenidos acusados de negligencia.



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